jueves, 6 de diciembre de 2007

Una de Arjona

Conozco los dedos de tus pies, pegados hasta los nudillos. Las venas de tu empeine, que se arremolinan en el tobillo. Las marcas en tus piernas, la almendra en tu rodilla derecha. Los muslos anfitriones y asfixiantes. Tu larga ve corta. La doble curva de tu cadera. La cicatriz que te divide, desde el pubis hasta el ombligo, para cerrar en un moño metálico, brillante. El pocito que se forma entre el abdomen y la montaña de costillas. Tus tetas bizcas, del tamaño de una mano, una más pequeña que la otra. Tu amplio esternón. Los brazos alargados y las manos quebradizas, las diez uñas menos una y el lunar de la palma izquierda. Los pliegues de tu cuello, tus orejas chiquitas, pegadas al cráneo, los ojos cansados, la nariz armoniosa, la boca mordida y en llamas. Tu cara ovalada, y hasta las flores de tu pelo.

Pero sigo sin entender qué carajo tenés en la cabeza.

5 comentarios:

el_iluso_careta dijo...

ARJONA, ARJONA...O LO AMAS O LO DETESTÁS, ESTOY EN EL GRUPO B.

UN POETA(?)QUE YA SABÉS QUE VA A DECIR...
"subo la colectivo, saco el bleto, me siento y miro por la ventanilla"

PIFF

Mou dijo...

A mí me es bastante indiferente, si tengo que elegir estoy más cerca de detestarlo, sin embargo este post se estaba pareciendo tanto... que no pude evitar el título.
Gracias por tu visita!

Juan Solo dijo...

Arjona no podría contigo.

Crispín dijo...

Me abstengo de Arjona, aunque podría llevarme algún poema suyo algún día que pase por la góndola indicada del súper.
Tu texto me hace revivir la forma en que uno descuartiza a la persona que adora, para reconstruirla en nuevos seres que se reinventan y se mejoran. Pero que no pierden la sencillez inicial.
Todo un trabalenguas sin sentido para expresar que me gustó mucho lo que escribiste.

Mou dijo...

Trabalenguas destrabado entonces.
Muchas gracias!